Etiqueta: Relatos

  • Caos

    Caos

    Mi corazón no es un lugar tranquilo, no puedo enfrentarme a tanto caos, no puedo mirar de cerca  los amaneceres rojizos sin quemarme los ojos. No puedo dejar de alimentar  mis sentimientos con la imaginación. Siempre que miro para adentro  un incendio está ocurriendo.  ¿Ahora qué hago con este músculo carmesí  del tamaño de mi […]

  • Tempus Solis / El Tiempo del Sol

    Tempus Solis / El Tiempo del Sol

    Un día en la playa, cuando yo era un niño, mi padre me enseñó a calcular la hora con el sol. El experimento requería simplemente de una rama y, a través de su sombra, se podía saber la hora de una manera aproximada. Con el tiempo me lo olvidé y siendo sincero jamás tuve la […]

  • Encargar cielos

    Encargar cielos

    Me olvidé el encargue de su cielo, ¡no sé qué hacer! Preguntar de nuevo sería bajar de calidad y disminuir el presupuesto, ningún trabajador puede interrogar a su cliente: —Disculpe, ¿qué me dijo? No lo estaba escuchando… Por la forma de expresarse es de los idealistas. Adictos a los colores pasteles, miro los baldes y […]

  • Las piedras no son del vecino

    Las piedras no son del vecino

    —Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, ¡te gané estúpido! ¡Tengo seis!  —No me ganaste nada, esa está partida. — ¿Qué decís? Nada que ver. —Mirála bien, la otra vez me hiciste perder por la que estaba rota, te devuelvo el favor… —Creé lo que quieras, para mí tengo seis.  Dejamos las mochilas en el piso, […]

  • Autobiografías en las paredes

    Autobiografías en las paredes

    Tengo que decirle a Romina algo sobre mí, y según me ordenaron debe ser algo bueno. Me presento. Me promociono. Y me vendo. Habíamos charlado ya de esto. Una enorme sonrisa que me llegue hasta el cuello. Lo extraño es que me parezco más a una mueca de tristeza. No converso con Romina sobre esto […]

  • Autobiografías en las paredes

    Autobiografías en las paredes

    Tengo que decirle a Romina algo sobre mí, y según me ordenaron debe ser algo bueno. Me presento. Me promociono. Y me vendo. Habíamos charlado ya de esto. Una enorme sonrisa que me llegue hasta el cuello. Lo extraño es que me parezco más a una mueca de tristeza. No converso con Romina sobre esto […]

  • La salida fácil

    La salida fácil

    Si hubiera esperado un poquito más esto no me habría pasado, cantaría por las mañanas, tomaría chocolatada, saltaría en un pie, e iría a aquel prado; donde todos están felices, juegan y corren sin leer un párrafo. Hay un cartel indicando el lugar, pero son tan analfabetos que les da igual. Se ahorran un manojo […]

  • Tengo que tener cara

    Tengo que tener cara

    Mi problema es que debo tener cara. Les pregunto a mis hermanos cuándo le salieron los ojos, la boca y la nariz, ellos no me contestan nada, solo señalan el almacén, me dan la lista de alimentos y me dicen «anda y volvé». Se supone que debo ir a lo de Doña Carmen, esta mujer […]

  • Las desventuras de la indiferencia

    Las desventuras de la indiferencia

    Cuando deje de escucharse el eco, y las bocinas de los autos reemplacen el canto de los pájaros, cuando el calor del fuego sea destituido por el calor de las estufas eléctricas, y el calor humano sea subestimado. Cuando no causen efectos los abrazos, y se toquen divididos por las políticas urbanas, ¡destinadas a la […]

  • Atragante a mi tía

    Atragante a mi tía

    Una vez mi tía Marta se atragantó con mis pastelitos, era veinticinco de mayo, y todos estábamos alrededor de la mesa de vidrio, hablábamos de cualquier otra cosa para disimular la toz moribunda de Marta, algunos le palmeaban la espalda, otros solo le decían que eructara, nadie culpó a los fideos con tuco de la […]