El inicio

No sé por qué pretendo,

si convencerlos a ustedes 

es más fácil que convencerme a mí.

Momento de quiebre

La tiniebla asecha.

En el limbo entre el olvido

y la esperanza,

solo encuentro los recuerdos,

los encuentros, la confusión

momentánea

de estar en ese tiempo,

de sentirme en el pasado

mientras camino los infiernos.

Cerezo japonés (o los caminos de la liberación)

Como plumas en el viento 

caen sobre mí,

de blanco carmesí

recordándome

lugares que nunca recorrí,

como en una fantasía de todas las que viví.


Elijo, siempre, las calles donde estás,

para hacer de mí camino

algo más que lo común,

para verte a contratiempo,

en medio del sonido imparable,

ensordecedor.


Pequeñas, blancas, rojas

chocan mí cabello de marea alta,

vuelan a buscar historias

que imagino cada mañana,

se van entre los edificios,

para no volverme a ver.

Toma de conciencia

La molestia de no ver,

no saber, no apreciar

a conciencia los momentos

que nos cambiarán, para siempre.

El recuerdo

Cuando se fue me dijo

que no me olvide del poder que tenía.

Mientras se aferraba a mis manos

en cenizas se deshacía.