No tengo ancestros, historia, ni linaje.
Me separé de esos conceptos cuando comencé la búsqueda de una identidad.
Yo no soy el pasado que me antecede, soy las heridas cicatrizadas de los tiempos en donde fui ingenuo.
Mi procedencia no es determinada por el lugar donde nací, yo sentencio mi pertenencia en donde yo llamé mi hogar.
Vine de la nada misma y a la nada volveré. Pero en este viaje de carne, no permitiré que se me sea impuesto un modo de vivir que no sea mío. No desistiré puesto que mi corazón arde con el mismo brillo que me encandila cuando miro hacia adelante. El futuro aguarda, yo me lanzo hacia él.